Me sigo considerando de izquierdas.
Por mi defensa de la laicidad del Estado y de la separación entre este y cualquier creencia religiosa.
No soy creyente. No me gustan las sotanas. Ni los orondos curas.
Y valoro la gestión y el talante por encima de todo.
Y detesto el abuso de poder y el nepotismo continuo socialista que padecemos y sufrimos en Hellín.
Por eso que el PP local de una vez despeje la incógnita de su congreso es necesario y bueno para Hellín.
Y como en principio solo se ha decidido un militante a dar el paso y presentarse pues que sepa escoger un buen equipo de integración renovado y joven y preparado.
Estoy hasta la coronilla de auxiliares y contables y vividores profesionales de la política.
Y de pluriempleados que encima le cargan a un arruinado ayuntamiento un master de urbanismo.
El pluralismo estará básicamente en que la nueva ejecutiva sea abierta, unida y democrática.
Que reuna a todas las corrientes y que ofrezca al alicaído votante pepero ilusión y ganas de cambiar Hellín que no es que este terminal sino que ya se la han cargado de todas todas los dichosos y tramposos compis.
Hellín a 17 de Febrero de 2.010.
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